VPP para los contribuyentes
El Ministerio de Vivienda sigue planteando nuevas fórmulas de acceso a la vivienda. Esta vez le ha tocado el turno a “la clase media”, los demasiado “ricos” para comprar una vivienda de protección oficial y demasiado “pobres” para adquirirla en el mercado libre. [ver noticia]
En teoría de la Hacienda hay un concepto que se llama "principio del beneficio". Se habla de ello cuando se definen los llamados "impuestos indirectos", como el IVA, y consiste en que paga impuestos el que se beneficia de algo. Si consumo pago y si no consumo, no pago.
Con el tema de la vivienda podríamos hablar de algo parecido. Los que mantenemos el país con los impuestos que nos quitan de nuestras siempre escuálidas nóminas no podemos acceder a viviendas de protección pública y vemos como éstas son dadas a personas que ganan algo menos (o que cobran "en negro"). El problema es que, una vez dada la VPP, ése que gana 2.000 euros menos que yo al año (o que nadie sabe lo que cobra), pasa a disponer de más renta disponible porque paga de hipoteca la mitad que yo. Y todo ello, financiado con mis impuestos.
Esta medida, por tanto, tiene un aspecto positivo, el de premiar al que realmente contribuye a las arcas del estado y evita en cierta manera ese sentimiento cada vez más generalizado del contribuyente que empieza a estar hasta las pelotas de pagar y que se lo lleven otros gracias a "Papá Estado".
De todas formas, como he dicho en más de una ocasión, la entrega de VPP en propiedad es un grandísimo error y constituye una clara injusticia social. Si por mí fuera, aboliría la idea de VPP en propiedad y las pondría TODAS DE ALQUILER revisando la situación económica del agraciado cada 3 años. No se puede dar viviendas (que son bienes de inversión a pagar en más de 20 años) basándonos en la situación económica coyuntural (de 1 año) de un individuo.
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