Buscador

domingo, 6 de febrero de 2005

Ya no tan cañí

Spain is... más de lo mismo

Pronto España dejará de ser cañí. La americanización es un hecho que está ahí, que nos concierne a todos. Es algo en lo que todos hemos colaborado involuntariamente. También los que reniegan de lo norteamericano (aunque luego se benefician de ello), ésos que por sistema hablan mal de EE.UU. sin conocer su realidad social ni su historia. Son razones de política, de ideología, de resentimiento y de envidia las que les hacen ser así de intolerantes. Conozco a uno que siempre se define como "antiyanqui" y lo dice muy orgulloso. Es de esos personajes contradictorios que van a las manifestaciones de "no a la guerra" con camiseta del guerrillero ése que llamaban Ché. Odia a EE.UU. pero es un asiduo del McDonalds, en su casa nunca falta una lata de Coca Cola y el software de su ordenador es de Microsoft.

Si bien muchos arremeten a las primeras de cambio contra todo lo que suena a EE.UU., tenemos que reconocer que en España hay una tendencia a copiar los modos de vida norteamericanos. Hay quien dice con razón que nos estamos americanizando (aunque sería más correcto decir norteamericanizando). Un ejemplo de la excesiva influencia que tenemos nos lo ofrece el gigante de automoción General Motors que ha decidido, con gran acierto, impulsar su negocio en España cambiando el nombre de una de sus marcas, Daewoo (marca coreana que despertaba la sospecha y el recelo del cliente), a Chevrolet. No les quepa duda de que las ventas subirán aunque les aviso que los coches son los mismos.

Además del éxito de las hamburgueserías, de la Coca Cola, de Papá Noel (que está dejando a los Reyes Magos en un segundo plano) y de otros tantos detalles, en los últimos años proliferan esas grandes superficies donde se instalan los llamados "megastores" a los que acudimos, como borregos, dispuestos a sufrir las aglomeraciones propias de estos lugares que nos recuerdan a los que hay en EE.UU. De ésto último (del borreguismo que importamos) hablaré otro día, que tampoco quiero ser un brasas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario